La guerra de los sexos

AL SEXO LO QUE ES DEL SEXO

Tengo un amigo con el que solemos filosofar acerca de nuestros temas predilectos: el  de ser solo amigos, se siente en confianza suficiente como para admitir sus debilidades con dichos temas ---en especial el sexo --- y gracias a el me entero de las fantasias que los hombres ocultan celosamente a las mujeres.
Solemos tener diálogos como este:
el:   ¿ vos sabes cual es la diferencia entre miedo y pánico ?
yo: no.
el:  ¡ miedo es la primera vez que no se te para por segunda vez !
yo:  ¡y pánico !

El afirma que los varones tienen hacia el sexo una actitud absolutamente competitiva, la misma que hacia el resto de la vida, en la que ponen en juego nada menos que el tamaño de su ego ( al que suelen confundir con el tamaña de otra cosa)
Una vez me confeso que no hay nada que o vuelva mas loco que la '' histeria femenina''
El se refería concretamente a la frigidez.

Una frígida --- pontifica --- es, en cierta medida, como una virgen.
Se siente el desafío de ser el primero en hacerla gozar, y esto es irresistible para el hombre, ser el primero, ya sea para escalar el Everest, abrir la tumba de Tutankamon o hacer sentir a una mujer . ¿ que tal ?

(Entre nosotros, como se ve que el pobre no pudo conseguir ni una virgen ni una frígida se caso con una igualita a Tutankamon).

Pero lo cierto es que los hombres que mas alardean con el sexo son los que están mas lejos de saber lo que verdaderamente necesitamos.

El propio Freud sostuvo alguna vez un disparados tal como que las mujeres eramos como hombres castrados yque lo que TODAS ambicionábamos era tener un pene .
Que me perdone Freud , pero yo nunca quise tener un pene que no viniera de con un hombre incluido.

Ademas hago mía la frase de Woody Allen: '' no creo que la envidia del pene sea exclusiva de las mujeres ''.
Y estoy convencida de que la frigidez no es otra cosa que la respuesta de la mujer al maltrato machista al que ha sido sometida su sexualidad.

La frígida es una rebelde.

Inmola su placer , porque no acepta el lugar de objeto .
Y reclama así su derecho a un goce que no la descalifique. Por eso el erotismo femenino necesita del ''  romance ''  para florecer.
Porque es la única vía de placer que le permitió nuestra cultura.
Para el hombre, en embargo, la cosa es bien distinta. El sexo no los ablanda, los confirma.

Puede haber pasado el mejor de los momentos en la cama y al instante siguiente querer abrir la leonera para que la dama desaparezca.
Para ellos, el sexo no tiene necesariamente que ver con el afecto, y todavía son muchos los hombres capaces de acostarse con una mujer para humillarla o despreciarla.

El erotismo masculino puede funcionar tan independientemente del amor que --- a veces --- funciona hasta por odio.
Y en esa misma dicotomia de su mandato la que los inhibe a la hora de decir '' te quiero '' , de entregarse a la intimidad o de llorar.

Les han hecho sentir que el amor los debilita.
Pero no creo que el sexo sea mas fácil para unos que para otros, ya que --- en ambos casos ---- tiene características de examen.

A ellos les preocupa la nota que van a obtener.
Y a nosotras si vamos a poder entregar a tiempo.

Es obvio que las mujeres necesitamos enamorarnos del hombre con el que hacemos el amor, porque nos enseñaron que el sexo era pecado.
Y es obvio que los hombres necesitan lo contrario, porque les enseñaron que el sexo con amor ¡ era mucho mas pecado todavía !
Afortunadamente, las cosas estaban cambiando y, a medida que hombres y mujeres nos vamos aproximando a la igualdad, se va achicando el abismo existente entre el erotismo femenino y el masculino.

Abismo cultural y no biológico.
Las nuevas generaciones parecen tener mas claro que el buen sexo solo puede ser el resultado del encuentro amoroso y no su punto de partida.
Personalmente, y mas allá de la culpa o del mandato. yo reivindico al amor como fundamento necesario de toda relación sexual.

Y el amor bien entendido empieza por uno.
Un amor--- como señala Erich Fromm-- compuesto de cuidado, respeto, conocimiento y responsabilidad.
¡ Por menos de eso, ya no me sentaría a negociar !