Mi Mejor Navidad , me la regalo Manuel

                Mes de diciembre , Teddy despertó con el cantico de los pajarillos ,aparecía el sol, pero la gente no percibía su brillo, eso no le importaba a Teddy  pues las calles las casas, los colegios, las tiendas, todo estaba muy bonito, y además podían cantar, armar nacimientos, jugar pensando en las vacaciones, y descansar de las tareas del colegio.

Faltaban pocos días para la navidad. _Algunos niños estaban muy contentos, porque iban a tener una linda Navidad. ,pero otros tristes porque el viejito barba blanca   de Noel  nunca les tuvo en cuenta y estaban seguros que este año iba a ser igual._

Poco antes de Noche buena se habían instalado muchos vendedores, con panteones, juguetes, guirnaldas, ropa, vinos, y muchos adornos casi en la mayoría de calles y plazas de la ciudad

Justo para la noche buena, con la idea de alegrar a  los niños del barrio, disfrazado, había aparecido Teddy, emulando  al muñeco gordinflón y sonriente, con un aristocrático sombrero blanco, una atractiva bufanda, una  una gran sonrisa pintada en su cara, que hacia juego con el saco y pantalón verde con cinturón amarillo, y una  barba  negra con escarcha dorada.

Los niños estaban muy felices con aquel personaje a quien lo comparaban con el gordiflón de Papá Noel a quien nunca pudieron verlo en persona. _ y les gustaba mucho jugar cerca de él. _Se tiraban a sus brazos, le jalaban la ropa le usaban para que no les vieran cuando jugaban al escondite, corrían alrededor de él, _ Su sonrisa bonachona les agradaba mucho porque era más tierna que ese joojojoo de aquel hombre de barba blanca que nunca se dejaba ver..

Cuando nadie miraba, Teddy, que era muy bromista, tiraba un juguete a algún niño distraído, que se quedaba muy sorprendido y sin saber quién se la había arrojado.
Los vecinos al ver este maravilloso gesto de Teddy y que pasaban por delante de él, al ir y volver del trabajo, iban incrementados sus cartones donde él tenía depositados los juguetes que poco a poco él iba regalando a los niños .

Su mejor amigo era un simpático perrito “calato”, que ladraba cantando de maravilla, y que acompañaba a Teddy a todos partes del barrio donde se ubicaba para alegrar a los niños.
Día de Navidad. La noche era más alegre, con luces de colores que brillaban en la mayoría de las casas, y con el sonido de los villancicos, los pastores recorrían cantado por todas partes de la ciudad recorriendo los nacimientos en cada una de las casas.

Teddy estaba disfrutando más que nunca, viendo todo lo lindo que la estaban pasando los niños del barrio las Maravillas. Pero de repente notó que Manuel no disfrutaba como los demás niños, estaba triste. “¿Qué te pasa, mi Manuelito que problema tienes?”_ Le pregunto Teddy. “ _tan bonita que es la Navidad, no quiero que nadie este triste, quiero que todos los niños la disfruten . _“¿Quién tiene problemas,?” Recusó, Manuel“

._Cuando venía caminando por la otra calle, mi Mamá y otra señora, que me han dicho que Ud. es el señor Teddy y esta disfrazado y que a pesar que no tiene trabajo y que tal vez será muy triste su cena de Navidad ,sin embargo Ud. trata de alégranos a todos los niños del barrio.

De repente, la gran sonrisa, por cierto muy fingida brotó de los labios de Teddy la cual iluminó a todas las calles del barrio. “¡Manuelito, _por eso estas triste,_ no te preocupes hoy tendremos una estupenda cena de Navidad!” _Exclamó contento, pero guárdame el secreto y no le digas a los demás niños quien soy.
“Mira, Manuelito” dijo Teddy, “He pensado que podíamos hacer más cosas para alegrar la Nochebuena a todos nuestros amigos.

Por ejemplo, vamos a orar a nuestro Dios creador del universo, para que nuestros corazones se sientan alegres y disfrutemos del nacimiento del niño Jesús, _ Si está bien dijo Manuelito y eso en que cambia que Ud. tenga una buena cena con su familia si no tiene plata para comprar nada. Ud. regala, regala a todos y a Ud. quien le regala algo. _ Pues la bendición de Dios me llegará Manuelito._ Dios tarda pero nunca olvida respondió con alegría Teddy.

Manuelito partió corriendo raudamente ante la sorpresa de Teddy quien se perdió a la vuelta de la esquina del barrio. Algunos niños seguían disfrutando de la presencia de aquel personaje que emulaba Teddy. - En verdad era la peor situación económica en que encontraba, ahh, pero ello no le amilanaba a que los niños tengan que mirar la navidad de otro modo.

De pronto Manuelito regreso con varios amiguitos cargados de todo lo que habían recolectado en sus casas y vecinos y entonando un villancico, se acercaban para decirle a Teddy Feliz Navidad, _Señor,Ud. es tan bueno ,es mejor que papá Noel ,por eso hemos acordado con nuestros padres hacer la cena en la calle ,y allí participaremos todos hemos venido a invitarlo ._ no nos diga que no puede porque allí si que nos vamos a sentir muy tristes.

Bueno está bien._ ah dijo Manuelito ya le falle , ahora todos sabemos que ud. es don Teddy ,así que le proponemos algo que hemos acordado todos los amigos del barrio . _Así contesto Teddy, y cuál es esa tan maravillosa propuesta muchachos mirándoles a todos los chiquillos que lo rodeaban.

Sabe – esperamos que no se moleste.. y se abalanzaron sobre el despojándole de la barba postiza, la bufanda , diciéndole la vamos a subastarla, se la llevará quien pague más jejejeje jejejej, jejejejej era el coro que retumbaba en los oídos de Teddy que sorprendido se quedó inmóvil ante el accionar de los niños y como en los cuentos de hada en un abrir y cerrar los ojos ya las mesas adornadas con luces multicolores ,con pavo panetones, frutillas ,empanadas ,mechados de gallina cerdo y pan, de acuerdo a la ocasión estaba instaladas en todo el barrio esperándole para que asista con su familia.

Sus cartones con los juguetes que quedaban, fueron repartidos a los niños más pequeños, por Manuelito y sus compinches.

_A ver quién da más por la bufanda,…no muy poco, algo más se escuchaba de la voz de este zagas niño. Por la barba algo más, un poquito más, está bien es de ud. señor .


Señores y señoras ,amiguitos todo lo recolectado le pertenece a don Teddy , a quien le debemos nuestra gratitud por habernos permito pasar esta navidad a todo el barrio juntos como verdaderos hijos de Dios y hermanos de Jesús. –

Se ha recolectado de la subasta 500.00 soles que es muy poco para pagar a quien no ha regalado la felicidad a todos los niños y nuestras familias en esta navidad y a cenar se ha dicho, disfruten, disfruten.

Manuel estaba también muy contento: estaba muy orgulloso de haber ayudado a este generoso amigo, los demás niños y sus padres estaban felices, pues por primera vez el Niño Jesús de Belén le había sonreído en su nacimiento.

Y es Teddy el admirable muñeco en replica, que cada navidad puede verse en el jardín o en la puerta de cada casa del barrio las Maravillas y que ha remplazado al tradicional papá Noel de gorro de fieltro rojo, con un pompón blanco de barba blanca, saco y pantalón rojo que nunca llega ni llegará por este barrio, pues es muy lejos la tierra de las Nieves eternas, donde él vive y nunca consigue pasaje para los barrios pobres.

Manuel y sus amigos del barrio, todos los años le piden a Teddy que se acuerde especialmente de los niños más pobres, y también de todos aquellos que, compartiendo sus cosas, hacen realidad el espíritu de la Navidad ya que él sin trabajo y aun sin apoyo de las grandes empresas, sabe hacer feliz a la gente más pobre, con los amigos del barrio.